"Los vínculos que se establecen a la hora de contar y leer un cuento son mágicos. Esa magia se crea desde bien pequeños y pocas cosas hay en educación infantil o entre unos padres y un hijo que embelesen tanto.
Es maravilloso comprobar una vez tras otra, los ojos bien abiertos y las caras de asombro, miedo, sorpresa, amor, mientras nuestros niños escuchan un cuento."
Os dejo unos cuentos que me parecen interesantes para leer en vacaciones en familia.
Los tres bandidos les encanta al instante a los niños y niñas ,los deja con la boca abierta. Con las negras y tenebrosas ilustraciones Tomi Ungerger nos acerca a tres malvados que poco a poco van cambiando de actitud gracias a Úrsula, una pequeña niña que sabe ganarse su corazón. Perfecto para trabajar la atención, las actitudes positivas y negativas y de como el ser humano puede cambiar. Para 3,4 y 5 años.
Escrito por Leo Lionni. Maravilloso libro, con unas bonitas ilustraciones y un lenguaje poético, nos narra la historia de una familia de ratones que se afana en preparar la llegada del invierno. No solo hay que almacenar comida .Nos hace ver la importancia de cultivar nuestro interior, la importancia del trabajo colaborativo y por supuesto, el valor del talento de cada uno. Ideal para niños y niñas a partir de 5 años.
Matrioska es un bellísimo libro. Ideal para ser contado con la ayuda de las maravillosas muñecas rusas. Escrito por Dimiter Inkiow e ilustrado por Roser Rius, aunque la ilustración no es lo que tiene más peso en esta historia. El autor nos narra la bonita historia de un carpintero que da vida a una muñeca y de como ésta se siente sola y le pide ser madre.
Maravilloso para trabajar el tema de la maternidad, los afectos, la soledad.
La manzana roja. El escritor e ilustrador, Feridun Oral nos muestra como un grupo de animales se ayudan y cooperan para poder coger la manzana. ¿Cómo lo harán? ¿Lo conseguirán?. Un libro perfecto para cualquier edad Educación Infantil .
¿Se puede tener un título más bonito?. Este maravilloso libro narra la historia de dos liebres color canela y lo mucho que se quieren. A través de la expresión corporal y un lenguaje sencillo y directo, cada una de ellas da entender que su amor es mucho, pero mucho más grande. Una linda competición de amor. ¿Y quién no ha jugado con sus hijos a esto? Un libro escrito por Sam McBratney con unas ilustraciones magníficas a cargo de Anita Jerán. Un libro muy bueno para trabajar las emociones. Ideal para antes de ir a dormir y recomendado todas las edades.
Historias de ratones es un imprescindible en cualquier biblioteca infantil y no tan infantil. Nos habla de una familia de ratones que están preparados para ir a dormir, pero antes de dormir es importantísimo hacer algo: ¿papá, nos cuenta un cuento?- Haré algo mejor. os contaré siete cuentos, uno para cada uno. Y es que no podemos olvidarnos de la hora del cuento, seamos mayores o pequeñitos. Un libro delicioso, tierno, ingenuo, pero con mucha hondura, como casi todos los libros de Arnold Lobel. Para contar y para ser leído.
Escrito po la ilustradora y escritora Jutta Bauer con un formato muy pequeño, como las cosas importantes de la vida. Y es que a la protagonista de esta historia, la oveja Selma no le hacen falta grandes cosas para ser feliz. Un libro para recordarnos (y es que lo olvidamos con demasiada facilidad), que lo importante está en la cotidianidad, en disfrutar de las pequeñas cosas que tenemos alrededor: un buen paseo, una siestecita, hablar con los hijos, conversar con los amigos… y para ti, ¿Qué es la felicidad?. Un libro sin edad.
La ovejita que vino a cenar es un cuento delicioso repleto de valores como la amistad, la generosidad y la aceptación de las diferencias.
Lleno de buenos valores, ayuda a los niños a comprender la importancia del trabajo en equipo y cómo colaborando todos juntos se puede alcanzar el fin perseguido, por difícil que parezca en un principio. Se trabaja también la empatía, y el saber pedir perdón, porque no siempre lo que hacemos, aunque sea de buena fe, produce los resultados que en un principio esperábamos.
Por Cuatro Esquinitas de Nada, de Jérôme Ruillier es todo un clásico de la literatura infantil, uno de esos álbumes absolutamente imprescindibles en una biblioteca para niños, muy especialmente si estamos interesados en potenciar la inteligencia emocional de nuestros hijos.
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